Los escribanos soteños de Pilar ya han criado, y las nuevas generaciones se apuntan al festín de la avena en la estaca. Por lo visto la comida fácil no les ha desincentivado en sus tareas reproductivas. Aunque se sabe que el alimento seco puede ser contraproducente para los pollos, este de la foto ya parece capaz de buscar agua por sus propios medios. Supongo que los progenitores han de saber que alimento deben de proporcionar a sus crías en cada momento de su desarrollo y complementaran la dieta, por ejemplo, con jugosos insectos.
Que desagradecidos, pues no que van y te dan la exclusiva a ti.... Aunque no me puedo quejar, desde el 3 de marzo que arribaron muertos de hambre, raro es el día que no me hacen una visita.
ResponderEliminarHe vuelto a ver al gorrión blanco y está criando, al menos hace aportes con comida en el pico.
Hasta la próxima.
Muy guapas las fotos Javier. Una chulada los soteños.
ResponderEliminarUn abrazo!!